Las secuencias Viniyoga de ejercicios físicos, respiratorios y meditativos son cuidadosamente diseñadas para satisfacer las necesidades únicas y siempre cambiantes del practicante y de su situacion particular.
Las asanas (ejercicios físicos) dinámicas y estáticas fluyen, sincronizadas con la respiración, para producir ciertos efectos beneficiosos en el cuerpo, la mente y las emociones.
A.H. Mohan explica:¨La Ciencia de las asanas está en el acto de comprender los efectos de los movimientos en el cuerpo, la respiración y la mente......El Arte dentro de la práctica está en la forma en que realizamos nuestra autoexploración y como la relacionamos con nuestras necesidades como individuo..¨(5)
Gary Kraftsow comenta¨La colocación específica de la postura dentro de la secuencia, determina el efecto terapeútico de la postura misma y de la secuencia entera.Es igual que la colocación de la palabra dentro de la frase: cambias su posición y cambias su significado.¨ (6)
Seguimos los principios de Patanjali: Tapas: la práctica habitual,Svadhyaya: la autoexploración e Ishvara Pranidhana: el enfoque mental en la calidad de la acción, con el fin de modificar nuestros hábitos cotidianos, reduciendo los más perjudiciales y aumentando los beneficiosos.
Se nota una mejoría en el equilibrio y la estabilidad a nivel físico, mental y emocional.
Los efectos del yoga en el aparato osteo-muscular
Las asanas fortalecen la musculatura y la flexibilizan al mismo tiempo. La contracción isométrica incrementa la resistencia y la revascularización (fibra roja muscular) con efecto rejuvenecedor. Las posturas de pie y otras que aguantan el peso del propio cuerpo pueden incrementar la densidad ósea (7)– buena protección contra el osteoporosis. Las asanas realinean el cuerpo – el cual, debido a las malas posturas y a la fuerza de la gravedad, se vuelve más asimétrico a lo largo de los años. Una mayor simetría a nivel postural ayuda a prevenir y / o aliviar tensiones, dolores y desgaste articular.
Una práctica regular suaviza las tensiones musculares y emocionales, permitiendo una actitud más relajada dentro y fuerade la sala de yoga. Hay un aumento de endorfinas (analgésicos naturales) en la sangre lo cual alivia el dolor y mejora el estado de ánimo.
Actúa sobre los aparatos internos:
El yoga beneficia nuestros órganos internos. Por ejemplo: fortalece el corazón. Algunas asanas ayudan a regular la secreción hormonal. Estimulan la circulación sanguínea y linfática (sistema inmune), el sistema digestivo y el excretor (8 y 9 ).Las asanas ejercen presión sobre ciertas zonas internas proporcionando un masaje eficaz. B.K.S. Iyengar afirma "mediante la acción de exprimir y expulsar la sangre o la linfa vieja y estancada y empapar la zona en sangre o linfa fresca y oxigenada, el yoga ayuda a utilizar los nutrientes necesarios.
Pranayama – los ejercicios respiratorios se amoldan a las necesidades del practicante, llevándole en la dirección más beneficiosa. Controlan y ralentizan el ritmo de la respiración, aumentan su profundidad e incrementan la capacidad pulmonar. Cada inspiración más lenta y más profunda trae un mayor aporte de oxígeno a las células. Cada espiración más alargada desintoxica y relaja más eficazmente. Acabamos con una sensación de tener más energía en un estado más sereno.
La práctica depranayama separado o junto con las asanas, estimula el parasimpático. Esta parte del sistema nervioso autónomo es responsable por el alivio del estrés y la ansiedad y por la recuperación en general
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